el motor eléctrico
Un motor eléctrico es un dispositivo transformador que convierte la energía eléctrica en energía mecánica a través de principios electromagnéticos. En su núcleo, el motor consta de un componente estacionario (estator) y un componente rotativo (rotor), trabajando en armonía mediante campos magnéticos. La operación del motor depende de la interacción entre estos campos magnéticos, creados por corrientes eléctricas que fluyen a través de bobinas de alambre. Cuando la electricidad fluye a través de estas bobinas, genera fuerzas magnéticas que hacen girar el rotor, produciendo potencia mecánica. Los motores eléctricos modernos vienen en varios tipos, incluidos motores de CC, motores de CA y diseños sin cepillos, cada uno optimizado para aplicaciones específicas. Estos motores encuentran aplicaciones en numerosas industrias, desde impulsar electrodomésticos hasta accionar maquinaria industrial y vehículos eléctricos. Sus niveles de eficiencia típicamente oscilan entre el 85% y el 97%, lo que los hace significativamente más eficientes energéticamente que los motores de combustión interna. La versatilidad de los motores eléctricos es evidente en su escalabilidad, ya que pueden diseñarse para aplicaciones que requieren una potencia mínima hasta aquellas que demandan miles de caballos de fuerza. Sus capacidades de control precisas, logradas a través de controladores electrónicos avanzados, permiten un control preciso de velocidad y posición, haciéndolos ideales para la automatización y procesos de fabricación de precisión.